Cómo proteger sus activos inmobiliarios de los acreedores
La planificación patrimonial y la protección de activos van de la mano. Después de todo, planificar la distribución de la riqueza es inútil si no tiene riqueza para distribuir.
Pero la protección de activos para bienes raíces es particularmente desafiante, porque es el único activo que no se puede mover. Muchas estrategias de protección de activos implican la reubicación de activos en jurisdicciones nacionales o extranjeras que ofrecen una mayor protección a los acreedores. Pero a diferencia de otros activos, como efectivo, cuentas bancarias y de corretaje, acciones y bonos, automóviles, barcos, joyas, obras de arte y otros objetos de colección, los bienes raíces no se pueden retirar de la jurisdicción en la que se encuentran. Echemos un vistazo más de cerca a varias estrategias para proteger sus activos inmobiliarios.
Dando regalos
Una de las formas más efectivas de proteger los bienes raíces de los acreedores es dárselos a sus hijos u otros miembros de la familia, ya sea directamente o mediante un fideicomiso. Si lo hace, los bienes raíces quedan fuera del alcance de sus acreedores y también puede reducir su obligación tributaria sobre el patrimonio. Sin embargo, la desventaja de esta estrategia es que perderá todo el interés económico y el control de la propiedad inmobiliaria.
Además, aunque la transferencia de activos puede protegerlo de sus acreedores, los activos ahora estarían sujetos a los reclamos contra la persona o entidad a la que se transfirieron los activos. Tenga en cuenta que regalar bienes raíces, así como las otras estrategias de protección de activos que se analizan más adelante, no lo protegerá de sus acreedores existentes si una transferencia constituye un "traspaso fraudulento". Una transferencia fraudulenta es una transferencia de propiedad realizada con la intención de obstaculizar, retrasar o defraudar a los acreedores. La mejor manera de evitar una reclamación de transferencia fraudulenta es transferir la propiedad lo antes posible, antes de que surjan reclamaciones de los acreedores.
Protegiendo tu hogar
Hay tres estrategias que pueden proteger su casa contra los acreedores:
Tenencia por la totalidad. Aproximadamente la mitad de los estados permiten que las parejas casadas tengan el título de su residencia principal como inquilinos en su totalidad. Al igual que en la tenencia conjunta, la tenencia total también protege la residencia durante el matrimonio contra las reclamaciones de un acreedor de uno de los cónyuges. No protege la residencia contra las responsabilidades conjuntas de una pareja.
Exenciones de vivienda. Algunos estados ofrecen exenciones ilimitadas de vivienda, que protegen la residencia principal de los acreedores, independientemente de si es propiedad de una pareja o de una sola persona.
En Estados Unidos por ejemplo existe la figura de Fideicomiso de residencia personal calificado (QPRT). Un QPRT le permite transferir una residencia principal o una casa de vacaciones a un fideicomiso irrevocable, colocándola así fuera del alcance de los acreedores. Sin embargo, a diferencia de una donación directa o una transferencia a un fideicomiso regular, usted conserva el derecho a vivir en la casa durante el plazo del fideicomiso. Al final del plazo, la propiedad se transfiere a sus hijos u otros beneficiarios. Los QPRT también se pueden utilizar para reducir los impuestos sobre donaciones y sucesiones.
Protección de otros bienes inmuebles
Para negocios e inversiones inmobiliarias, una estrategia eficaz de protección de activos es transferir el título a una sociedad de responsabilidad limitada (LLC) o sociedad limitada (LP). Siempre que la transferencia no sea una transferencia fraudulenta y la LLC o LP esté estructurada y operada correctamente, la entidad protege la propiedad inmobiliaria de los reclamos de los acreedores.
Un acreedor con un juicio contra un propietario individual (un miembro o socio limitado) no puede satisfacer ese juicio contra los activos de la entidad. Generalmente (pero no en todos los casos), el único remedio del acreedor es buscar una "orden de cobro", que le permite al acreedor interceptar cualquier distribución hecha por el deudor. Mientras la entidad no distribuya los bienes inmuebles u otros activos al deudor, los esfuerzos del acreedor por cobrar se frustran.
Planifica temprano
Si está expuesto a importantes riesgos de responsabilidad, ya sea personal o profesionalmente, es una buena idea tener un plan de protección de activos. Y cuanto antes implemente su plan, más probabilidades habrá de que tenga éxito.
Este artículo se volvió a publicar con permiso de JDSupra.
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